Las plantas están hechas un lío, no
tienen claro que es lo que tienen que hacer.
¿Cómo saben que tienen que salir de su letargo invernal e iniciar un
nuevo ciclo vital? ¿Cómo saben cuando se acerca la primavera?
En primavera es cuando en la mayoría de las
plantas se produce una explosión de vida apareciendo brotes verdes y flores,
brindando un maravilloso espectáculo de color y fragancias.
Las plantas tienen genes que determinan
el desarrollo floral; cuando intentas conocer en profundidad todo este fenómeno,
la floración deja de ser ese proceso romántico que nos invita a disfrutar de su
belleza.
Después de mucho leer, he llegado a la conclusión de que como mi
propósito no es hacer una tesis de
botánica , me basta saber que los genes que determinan cuándo y cómo ha de
florecer una planta se activan según la
cantidad y la calidad de luz que reciben sus hojas y que el fotoperiodismo no
es solo el periodismo gráfico, es también la reacción fisiológica de las
plantas y los animales a la duración del día o de la noche.
Cada planta, como nosotros, está influida por el ciclo
circadiano; el estimulo ambiental que con mayor frecuencia utilizan las plantas
para detectar la época del año en la que se encuentran es la duración relativa
del día y de la noche y a esto se llama fotoperiodo; llamemos como le llamemos, está claro que el comportamiento
de las plantas depende de la luz; la floración es una respuesta fisiológica al
fotoperiodo. Hay plantas de día largo, plantas de día corto, plantas de día neutro
y de día intermedio, aunque sería mejor hablar de la noche, porque en realidad las plantas miden la duración de la noche y no
la del día. Esto explica por qué hay plantas que florecen en primavera
cuando el día es más largo y otras lo hacen en invierno cuando los días son más
cortos. Son plantas de día largo o noche corta el clavel y la campánula y también las espinacas y el trigo; son
ejemplos de plantas de día corto los crisantemos y la poinsetia, de día
intermedio es la caña de azúcar y de día neutro el tomate y el diente de león.
Pero también la floración depende de la
cantidad de frío al que las plantas están
sometidas durante el invierno. Gracias a una molécula, miden la cantidad de
frío y si el número de horas de frío que acumulan no es suficiente, las plantas
florecen poco o mal. Es conveniente que pasen periodos de 30 o 40 días de frío.
Esto explica las diferencias de la calidad y de la cantidad de floración y por
ende de los frutos de una temporada a otra y también es la razón de por qué el
calentamiento global afecta el comportamiento de las plantas. Otra consecuencia
de la alteración del ritmo normal de las plantas es que cuando se adelanta la
floración, los insectos y las aves no están todavía en condiciones de cumplir su papel en
la polinización y dispersión de las semillas.
He simplificado mucho este tema de la fisiología vegetal y he pensado que es más divertida y romántica la interpretación que de este proceso hace la mitología griega: Perséfone, hija de Zeus y Deméter, una vez al año sube desde el Hades a la Tierra y hace que las plantas despierten, se cubran de flores y llenen el mundo de color y aroma.
Persefone de Stephen Mackey (óleo sobre tabla) |
En otro post del blog ya conté como
Perséfone con sus idas y venidas del Hades a la Tierra, condiciona la secuencia
de las estaciones del año y qué importancia tiene en esto la granada, una
fruta que me encanta.
* "rosa rugosa" del seto de The Rock Cottage
** esquemas tomados de la Internet
*** Graphosoma lineatum (Chinche del Milán) en la vegetación de las dunas de Canet
** esquemas tomados de la Internet
*** Graphosoma lineatum (Chinche del Milán) en la vegetación de las dunas de Canet
1 comentario:
Siempre me han llamado la atención los cambios que se producen en plantas y árboles, que explicas muy bien. Gracias
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