Por la nueva faceta de mi actividad laboral tengo menos tiempo para dedicar a mis aficiones y al blog. Isabel, en un comentario al post "el pánico de 1837", te explicaba mi nuevo rol.
Ahora con la llegada del verano el problema se acentúa, me conecto menos a Internet; un mayor contacto con la naturaleza me hace no estar tanto ante el ordenador; dedico más tiempo a otras aficiones: la fotografía y la lectura.
Este post es para desearos un feliz verano y daros las gracias a los que lo visitáis (Pumuki me ha alegrado volver a tener comentarios tuyos, de verdad que te echaba en falta).
Cargaré las pilas con fotos e ideas y me volveréis a ver por aquí pero no puedo aseguraros cuando. Feliz verano, descansad y disfrutad si podeís del dolce far niente.
* girasoles en Mora de Rubielos, agosto 2008
Feliz tú, lales, que puedes disfrutar de un verano largo... Descansa mucho, disfruta mucho y esperaremos con paciencia e interés tu regreso. Si ves alguna escultura bella, no dejes de fotografiarla, por favor. Un abrazo muy fuerte.
ResponderEliminarQuerida Isabel: las vacaciones las tomo en agosto, pero desde la semana que viene traslado mi residencia a la playa, el plan de vida diario es diferente aunque por las mañanas siga trabajando. Por la tarde me acuesto en una hamaca entre dos árboles y con un libro y mis pensamientos paso el tiempo placidamente. Y en cuanto a esculturas, este fin de semana voy a Valladolid y aunque ya hace años visité el Museo Nacional de Escultura, he reservado la mañana del viernes para poderlo pasear con tranquilidad. Me acordaré de ti.
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